VII Encuentro de la ELADEPAC. Cuba 2015
Este nuevo encuentro del grupo ELADEPAC tuvo lugar en La Habana del 27 de julio al 2 de agosto de 2015 y ha permitido tener una visión más próxima de la realidad cubana desde el punto de vista arquitectónico y humano, plantear nuevos proyectos y renovar viejas amistades de lejanos territorios. Las jornadas académicas tuvieron lugar en la Casa Víctor Hugo de La Habana. Después de la bienvenida a cargo de Silvia María Morales y de la presentación de las jornadas por parte de Salvador Tarragó y de María-Cruz Santos de S.O.S. Monuments, se pasó a la primera conferencia en la cual la Profesora María Victoria Zardoya nos introdujo en la evolución urbana de la ciudad de La Habana desde su fundación hasta la actualidad. La sesión terminó con una conferencia sobre la arquitectura del molde a cargo de la profesora Felicia Chateloin. Por la tarde de este primer día hicimos un recorrido peatonal por las calles de La Habana Vieja. La ciudad nos cautiva por la belleza y monumentalidad de sus edificios coloniales y el encanto de sus calles. Impresionan sus grandes plazas, la de Armas con su mercadillo de libros, la Plaza de la Catedral y la Plaza Vieja. Lamentablemente muchos edificios muestran evidentes señales de deterioro y falta de mantenimiento, habitados por varias familias que conviven en un reducido espacio. La mayor parte del barrio está cerrado al tráfico rodado y sólo se permite el paso de ciclotaxis, mucho más utilizados por los locales que por los turistas que llenan la ciudad. Por la noche estuvimos en la fortaleza de La Cabaña para asistir a la ceremonia del cañonazo que las 9 de la noche cerraba las puertas de la ciudad. Resulta muy agradable pasear por las calles y entrar en los locales abiertos, la seguridad es completa y la única excepción viene impuesta por el deterioro del pavimento y su poca luz.
Durante la segunda jornada recorrimos con Silvia, el Paseo del Prado, zona que antiguamente estaba ocupada por las murallas y sobre la cual se construyeron el Capitolio, teatro, palacio presidencial y centros culturales de los emigrantes españoles. Por la tarde recorrimos con la arquitecta Felicia Chateloin, la Avenida del Cerro, caracterizada por sus viejas quintas de recreo con soportales, ensalzadas por Alejo Carpentier. Los edificios se encuentran muy deteriorados aunque su interior deparan agradables sorpresas como la finca donde pudimos ver las antiguas piscinas, separadas por sexos, que ahora han sido incorporadas a las viviendas como una dependencia más y que exigen por su originalidad una pronta rehabilitación.
En las siguientes jornadas visitamos el barrio del Vedado, construido al desaparecer la servidumbre militar de construir a 1.000 metros del fuego de los cañones de las murallas. La profesora María Victoria Zardoya nos descubrió este ensanche del siglo XIX que queda separado de la capital por el curso del río Almendaris, formando una retícula orientada 45 grados hacia el norte, con edificaciones precedidas por un jardincillo. El barrio nació como una zona de veraneo con un carácter aristocrático. Desde primeros del siglo XX sus calles fueron nombradas con números y letras, los edificios fueron cedidos a los combatientes mambises mientras que La Habana Vieja quedará en manos de los nuevos emigrantes españoles. Aquí se encuentran los mejores cines, hospitales, la universidad, hoteles, embajadas, cementerio Colón. Para la visita al barrio de Miramar contamos con las explicaciones del arquitecto Víctor Pancorbo que nos llevó a ver las casas señoriales con amplios jardines, mayores que las del Vedado. Visitamos el edificio construido por Mario Romanech, Premio Nacional de Arquitectura en la confluencia de la calle 60 con la 7ª Avenida. Una última visita fue la realizada a las Escuelas Nacionales de Arte diseñadas por Ricardo Porro donde contamos con la presencia de su vicerrectora y del arquitecto Héctor Gómez que había restaurado uno de los edificios. Éstos fueron construidos sobre un antiguo campo de golf y cuentan con una arquitectura adaptada a la climatología local que le permite disfrutar de un agradable frescor a pesar de las elevadas temperaturas exteriores.
En las sesiones celebradas en la Casa Víctor Hugo, los arquitectos Gabriela Mareque, Juan José Botero, Ricardo Vergara, Tarcisio Valdés, Susana Zanón y Mª Teresa Alarcón, nos explicaron los proyectos realizados en sus zonas de trabajo, en el casco histórico de Buenos Aires, Marinilla, fachadas de Barcelona, iglesia de San Felipe Neri de Panamá, Villa Paula en Vallvidrera y la iglesia de la Cruz de Corrientes. El profesor Salvador Tarragó planteó el proyecto de creación de la Hermandad de las Estrellas Polar y de la Cruz del Sur, encaminada a la defensa, enseñanza, conservación en intervenciones en el patrimonio cultural y natural
Hicimos una escapada para visitar la ciudad de Trinidad. Población turística donde el profesor Víctor Echenagusía nos acompañó en el recorrido por el Museo de Arquitectura, un edificio construido en el siglo XVIII. Al día siguiente fuimos con el profesor al Mirador de la Loma del Puerto para contemplar el Valle de los Ingenios, en el cual llegaron a funcionar 74 explotaciones azucareras con mano de obra esclava. Estuvimos en el Ingenio Guaimazo y luego en el Ingenio Manaca Iznaga donde ascendimos a lo alto de una impresionante torre de 45 metros de altura desde donde controlaba toda la actividad con sus toques de campana. Actualmente el lugar cuenta con una importante artesanía de bordados a mano. El viaje fue aprovechado para hacer un balance de las jornadas vivida en nuestra estancia en Cuba.
También hubo un poco de tiempo para las actividades lúdicas, así cabe reseñar el circuito que realizamos por las calles de La Habana en coches de época, la contemplación de la magnífica puesta de sol sobre el Malecón desde el Hotel Nacional o la degustación de daiquiris en el Floridita junto al busto de bronce de Hemingway o del mojito en La Bodeguita.
Han sido unas jornadas muy intensas por las actividades desarrolladas en el poco tiempo disponible, interesantes por permitirnos penetrar en el corazón de la ciudad y de sus gentes. Vivimos también los problemas burocráticos por creados por los “vauchers” y conocimos algunas de las fuertes limitaciones que padece la población sometida al embargo internacional, pero también hemos podido vislumbrar las potenciales posibilidades que ofrece esta isla que fue conocida como la “Perla de las Antillas”.